Fusión perfecta de sabores mexicanos y norteamericanos. Cada ala de pollo está sazonada y cocida a la perfección para lograr una piel crujiente y una carne jugosa, bañadas en una salsa secreta que equilibra lo picante y lo dulce. Se sirven con crudités frescos y crujientes como zanahorias, apio y pepinos, ofreciendo un refrescante contraste

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *